Tengo la costumbre de, mientras leo, hacer marcas en aquellas paginas con algún párrafo especialmente interesante o en las que encuentro algo que presiento me va hacer volver a ellas en algún otro momento futuro.
Pero no hago anotaciones al margen, no, ni entrelineas. Con una simple doblez en la esquina orientada a la página de interés ya me vale. Y para mí es como un juego (o como un ejercicio). Cuando hago esto, pienso siempre en la certeza de la que hago gala al creer que dentro de años, cuando vuelva a esas páginas dobladas, al releerlas, voy a tener muy claro siempre qué es lo que me hizo destacarlas.
Y también, por supuesto pienso en que quizás en alguna ocasión no encuentre ese párrafo, línea, palabra…lo que sea que en el momento de la primera lectura me motivara a hacer dicha marca. Ese momento pondrá de manifiesto que algo ha cambiado en mí.
Lo que me será más difícil es dilucidar el qué ha cambiado…
Estoy leyendo actualmente los diarios de Anaïs Nin…y me estoy dando cuenta de que con esta vieja costumbre mía, cada uno de ellos va a acabar adquiriendo el doble de su grosor original, por lo que, si continúo, voy a tener que necesitar una balda enterita en mi librería sólo para los 5, en origen pequeños, tomitos.
Lo que me será más difícil es dilucidar el qué ha cambiado…
Estoy leyendo actualmente los diarios de Anaïs Nin…y me estoy dando cuenta de que con esta vieja costumbre mía, cada uno de ellos va a acabar adquiriendo el doble de su grosor original, por lo que, si continúo, voy a tener que necesitar una balda enterita en mi librería sólo para los 5, en origen pequeños, tomitos.
Un poco de Anaïs:
“¿Tiene razón Henry? Dice que no quiere que siga escribiendo el diario. Cree que es una enfermedad, un subproducto de la soledad. No sé. Se ha convertido también en el cuaderno de notas de mi extroversión, en un cuaderno de apuntes de viaje. Ha cambiado de aspecto. No puedo abandonarlo, estoy segura. Henry dice:-Guarda el diario bajo llave, y no te preocupes más. Me gustaría verte vivir sin el diario, escribirías otras cosas.”
“¿Tiene razón Henry? Dice que no quiere que siga escribiendo el diario. Cree que es una enfermedad, un subproducto de la soledad. No sé. Se ha convertido también en el cuaderno de notas de mi extroversión, en un cuaderno de apuntes de viaje. Ha cambiado de aspecto. No puedo abandonarlo, estoy segura. Henry dice:-Guarda el diario bajo llave, y no te preocupes más. Me gustaría verte vivir sin el diario, escribirías otras cosas.”
Extracto del Diario I (1931-1934) de Anäis Nin
3 comentarios:
Hola!!
No sabes la ilusión que me produce cuando alguien nuevo se pasa....
La entrevista de Pedro viene ayer en el Diario Montañes.
Se la hizo Alvaro Machin.
Oye,no hay casualidades....el otro dia leí algo de Anais en otro blog y me encantó un párrafo que iva mas allá...y pensé tengo que buscar un libro sobre ella...y mira por donde hablas tu de ella...
un saludo y pasate siempre q kieras!
opium09
Que increíble, yo hago las mismas marcas por las mismas razones, y pienso igual en cuanto a encontrar o no las palabras que en algún momento me hicieron doblar la esquina de la hoja.
Reitero: que increíble. Pero, por alguna razón, que gusto.
qué coincidencia. lo de marcar no, que eso sabemos que lo hace mucha gente, sino lo de tener el mismo pensamiento.
Saludos!
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