Dioramas

 Cuando iba hacia el trabajo esta mañana me he acordado de repente de cuando éramos jóvenes y hacíamos “bote” para salir “de marcha”. Siempre que se dejaba el bote a cargo de ciertas personas, uno invariablemente acababa en el bar preguntándose dónde estaría la cerveza que le correspondía mientras observaba al “administrador” en la barra con dos amigos repitiendo ronda discretamente.

 

Y había quien te miraba como con incomodidad si expresabas, aunque fuera sutilmente,  dicha observación en voz alta.

 

 

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También de camino a la oficina, he visto en el suelo una pequeña llave de plástico azul. Como buena "espigadora" la he recogido pensando en un futuro diorama.